El término SPAM se utiliza para designar a contenidos comerciales que se reciben de manera no deseada y que resultan de escaso o nulo interés por parte de los consumidores. Conocedoras de este hecho, las empresas que se dedican a la divulgación de estos contenidos utilizan tácticas cada vez más agresivas con tal de hacer llegar el mensaje, hasta el punto de causar verdaderos trastornos a los usuarios cuyos números de teléfono o direcciones de correo electrónico han acabado en manos de estas empresas.
A continuación, vamos a explicar en qué consisten los distintos tipos de SPAM y en qué se diferencian todos ellos entre sí.
El origen del SPAM
Si nos adentramos en el origen de lo que hoy conocemos como SPAM, tenemos que hablar de los orígenes tanto del término como del contenido. Para empezar, el término SPAM se utilizó en un sketch del grupo cómico británico Monty Python para referirse a un condimento alimenticio que se añadía a todos los platos de manera no deseada e invasiva.
Años más tarde, se utilizó esta palabra para referirse a comunicaciones que eran igual que ese ingrediente del sketch del grupo cómico, solo que no tenía ninguna gracia para los miles de consumidores que lo sufrían.
El origen de los contenidos comerciales no deseados está algo más difuminado, ya que la publicidad por definición siempre lleva una connotación invasiva y está ligada irremediablemente al capitalismo.
No obstante, muchos estudiosos de la historia de la publicidad coinciden en que la aparición del marketing directo y la reconcepción de las tácticas invasivas de publicidad llevadas a cabo durante la segunda mitad del siglo XX fueron un punto de inflexión para este tipo de contenidos que, aprovechándose de las oportunidades que brindaban las nuevas tecnologías y los nuevos modos de comunicación, se expandieron rápidamente y son, a día de hoy, prácticamente imposibles de erradicar.
Tipos de SPAM según contenidos
En función de su contenido, podemos estar hablando de varios tipos de SPAM. A pesar de que estos mensajes siempre utilizan ciertos reclamos, como regalos o promociones, muchas veces su envío vulnera ciertas leyes en materia de protección de datos y de adecuación de contenidos en presencia de menores.
Mensajes con contenido sexual
El sexo es el principal reclamo de las comunicaciones publicitarias y el SPAM lo utiliza para aumentar el tiempo medio de lectura de sus emails y evitar que las llamadas se cuelguen de inmediato.
Aunque se le ha puesto coto a este tipo de prácticas, sobre todo por la pasmosa facilidad con la que estos contenidos podían ser visualizados o escuchados por niños, todavía siguen utilizándose mensajes con contenido para adultos para actuar de gancho.
A pesar de que el SPAM es fácilmente reconocible, las agencias que se dedican a emitir estas publicaciones se esfuerzan por crear contenidos que sean mínimamente atractivos, y el sexo es uno de los principales reclamos publicitarios, solo que en el SPAM se utiliza de una manera mucho más directa, menos disimulada y con contenido audiovisual no apto para menores.
Timos sobre salud y medicina
La lacra de la homeopatía ha traspasado todos los límites y, conocedores del tirón que tiene esta corriente tan absurda como irreal, muchos mensajes utilizan estos contenidos para resultar atractivos para la audiencia general.
Muchos mensajes prometen resultados asombrosos en campos que, generalmente, preocupan al gran público, como el tamaño de los pechos, el combate de la eyaculación precoz, las dietas milagrosas que hacen reducir peso en poco tiempo o las sustancias depurativas son solo algunos de los productos y beneficios que incluyen estos mensajes.
Además de lo incómodo que resulta recibir este tipo de comunicaciones, estos mensajes resultan peligrosos porque no cuentan con el respaldo de ninguna clase de agencia sanitaria y sus afirmaciones no están basadas en ningún organismo ni representante oficial del ámbito científico, lo que expone gravemente la salud del público que crea sus contenidos.
Contenidos educativos y oportunidades profesionales
El éxito académico y la ocasión de ser promocionado en el ámbito laboral son dos de los temas más importantes para miles de familias, que sueñan con saborear la gloria en el plano profesional. Además de falso, estos mensajes pueden incitar a invertir en cursos que no cuentan con el respaldo de ninguna institución y, por tanto, no tienen validez para ejercer.
Lo peor de todo es que estos mensajes también utilizan las ansias de superar los objetivos académicos de los adolescentes que quieren estudiar la carrera de sus sueños o aprobar la Selectividad con nota, lo que hace que estos mensajes sean especialmente peligrosos en un momento en el que todos los jóvenes disponen de smartphone con acceso las 24 horas a su bandeja de correo electrónico.
Tipos de SPAM en función del canal
Los contenidos publicitarios invasivos también se pueden catalogar por el tipo de plataforma que emplean para propagarse. La digitalización ha servido para acceder a todo un mundo de posibilidades, pero también ha facilitado la comunicación global y ha permitido que los contenidos de SPAM se propaguen a una velocidad mucho mayor.
El correo electrónico ha sido un poderoso aliado en la lucha contra el SPAM, ya que desde hace años todas las plataformas de e-mail cuentan con una bandeja de SPAM a la cual remiten todos los mensajes de procedencia dudosa o contenido meramente publicitario. No obstante, estos filtros no son infalibles y algunos mensajes de SPAM pueden acabar recibiéndose en la bandeja de entrada de la cuenta principal, aunque cada vez son más eficaces.
Teléfono
Sí, esas llamadas comerciales que recibes a horas intempestivas son consideradas SPAM y puedes denunciarlas ante las asociaciones de consumidores y ante los organismos competentes. De hecho, algunos teléfonos inteligentes ya disponen de un sistema de alertas que sugiere al propietario que la llamada que está recibiendo puede ser SPAM, lo que puede ser de ayuda a la hora de bloquear el teléfono e impedir que se vuelva a poner en contacto contigo.
Foros y blogs
Los blogs son una herramienta de comunicación personal muy útil para divulgar contenidos sobre un determinado tema, pero también son el caldo de cultivo ideal para que mensajes publicitarios no consentidos se propaguen, sobre todo en la sección de comentarios. Cada vez existen más herramientas capaces de bloquear estos contenidos, pero ante estrategias de divulgación agresivas, estos filtros pueden presentar alguna que otra carencia.
Pop-ups
¿Recuerdas esos avisos de ventanas emergentes y pop-ups que salían en los antiguos navegadores de Internet? Pues sí, es un tipo de SPAM que todavía está presente en multitud de páginas.
Cuando al hacer clic sobre una ventana se abre otra sin tu consentimiento, estás ante un tipo de SPAM que, por cierto, puede llegar a ser muy invasivo e incluso comprometer la seguridad de tu dispositivo, ya que son la puerta de entrada de distintas formas de malware.
SMS
Con la desaparición de las antiguas plataformas de SMS premium, el envío de SPAM a través de este tradicional canal de comunicación ha ido menguando. Sin embargo, todavía es muy empleado por agencias que utilizan estrategias de divulgación alternativas.
El peligro de los SMS es que suelen contener un enlace que, en el mejor de los casos, puede llevar a más contenidos publicitarios. Otras, en cambio, pueden llegar a un archivo descargable que contenga un programa malicioso que tome el control de tu móvil.
Los mensajes publicitarios que envían los propios operadores de telefonía también son SPAM y no pueden obligarte a recibirlos, por lo que te tienen que dar de baja de su base de datos si lo solicitas.